lunes, 30 de enero de 2012

Aleluya!!!!!


Aleluya!!!!
El tiempo pasa y yo sigo viviendo, con los dolores y las ausencias de siempre, pero sigo viviendo.
Con la suerte y la muerte a la vista, con las golondrinas y los buitres, con el alma en pena y la cordura casi loca, con las cenizas del olvido
y el pan duro de las promesas.
Pero sigo viviendo.

Aleluya. En alguna rara ocasión mi soledad se llena de prójimos
y mis brazos abrazan y abrasan.

Mi memoria viaja de noche en noche; mis jardines, de amanecer en amanecer.
Vivir aquí, en los arrabales del universo, no está tan mal. Dos por tres vienen pájaros curiosos, con su experiencia del espacio, y acaban colgándose en un crepúsculo de árboles.
Crecimos en un exilio de la esperanza, sin advertir que era un exilio de la nada. 
Aleluya. La nada también puede ser todo y los otros también pueden
ser nosotros.
Si la tristeza nos empapa con su lluvia, digamos aleluya aleluya,
primero despacito y luego en alarido, para que al fin nos encierren...

VIVIR ADREDE - Mario Benedetti